Efectos de la quimioterapia (parte III)

Para acabar con este apartado extenso de los efectos secundarios nos vamos a dedicar a lo que nos falta como son los cambios en el pelo, uñas... etc. 

Después de la quimioterapia un efecto secundario muy frecuente es la caída del pelo a lo que llamamos alopecia, debido a que los medicamentos destruyen el folículo piloso y así perdemos el pelo. No siempre aparece, depende del medicamento.Por otro lado tenemos que aclarar que la caída del pelo no solo es de la cabeza, sino de otras partes del cuerpo como las cejas, las axilas, las piernas y demás zonas con vello. Esta alopecia no es definitiva si no que después de finalizar el tratamiento, el pelo vuelve a crecer. Como inciso debemos recordar que al perder el pelo en zonas de la cabeza, la piel de éstas es más sensible y debemos protegerla más. 

Otra alteración es la producida en uñas y piel. En la piel aparece picor (prurito), color rojizo (eritema), sequedad y escamación. Mientras tanto, las uñas se vuelven oscuras, y se rompen con más facilidad ya que son más débiles. 

Algunos fármacos utilizados con quimioterapia pueden producir lesiones en nervios que inerven miembros de nuestro cuerpo. Si notamos una disminución de la sensibilidad, hormigueos, pinchazos en las extremidades o incluso una disminución de la fuerza y destreza podemos estar ante el daño de un nervio. Normalmente estas alteraciones son pasajeras y desaparecen cuando se finaliza la quimioterapia, pero ya sabemos que en algunos casos las recuperaciones llevan su tiempo. 

Además de a los nervios los fármacos afectan al corazón, de ahí que antes de iniciar una quimioterapia se controle el funcionamiento de este músculo para asegurarnos. 

El aparato urinario también es uno de los castigados por la quimioterapia, y así vemos como algunos fármacos causan cistitis lo que conlleva un dolor y escozor, sensación de orinar muy continua e incluso sangre en la orina. Para prevenirlo se suelen tomar medicamentos que protegen la mucosa de la vejiga, a parte de beber abundantemente. 

Al eliminarse por el riñón todos estos fármacos, este órgano también es de los principales afectados de ahí que se insista en la necesidad de beber entre 2,5 y 3 litros de agua al día para que nuestros riñones realicen el trabajo de forma normal y sin esfuerzos. 

Por último, el aparato genital es el último afectado debido a que por el malestar general y el cansancio, los pacientes disminuyen su deseo sexual. Además si se ven con alopecia esto les crea un problema de autoestima, lo cual propicia la disminución del deseo sexual. Por si fuera poco, algunos fármacos también dañan los testículos en los hombres y los ovarios en las mujeres. Por ejemplo en los ovarios, reduce la producción de hormonas femeninas como los estrógenos y la progesterona, produciéndole al paciente síntomas parecidos a la llegada de la menopausia. En el hombre puede haber ciertas lesiones en los nervios que impidan la erección además de que los fármacos disminuyan el número de espermatozoides, haciéndolos temporalmente estériles hasta que se acabe el tratamiento con quimioterapia. 

Después de ver todos los inmunerables efectos secundarios de la quimioterapia, es cuando debemos de admirar a esos pacientes que a pesar de todo eso siguen luchando y queriéndose a si mismos con un fuerza inmensa. 

Fuente: 
https://www.aecc.es/SobreElCancer/Tratamientos/Quimioterapia/Paginas/Efectossecundariosmasfrecuentes.aspx