El cáncer es un problema de salud pública ya que, aún si el
índice de supervivencia de muchos tipos de cáncer ha mejorado en los últimos
años, este padecimiento ocupa el segundo lugar como causa de muerte en Estados
Unidos, y el tercer lugar en México, después de problemas cardiovasculares y la
diabetes mellitus. Bajo el término genérico cáncer se engloba un conjunto de
enfermedades relacionadas con crecimiento y proliferación celular desordenada
tales como son la alteración del ciclo celular, alteración de vías de
señalización, pérdida de la apoptosis y de la senescencia. De este modo, un
cáncer inicia con la aparición de células cancerosas que presentan numerosos
cambios fenotípicos y genotípicos.
El cáncer es un proceso multi-etapas y cada una de las
diferentes etapas tiene una duración variable dependiendo de factores
genéticos, del estilo de vida del paciente y de su exposición a factores de
riesgo. Los principales factores de riesgo que influyen en la oncogénesis son:
Dieta, edad avanzada, tabaquismo, consumo de alcohol, sedentarismo y obesidad,
menopausia, exposición a radiaciones, exposiciones accidentales con químicos y
otros compuestos carcinogénicos. Evitar o reducir estos factores permite
disminuir las posibilidades de padecer cáncer. Además, infecciones virales como
el virus del papiloma humano (VPH), el virus de la hepatitis B (HepB) o
hepatitis C (HepC), o el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) pueden
aumentar el riesgo de padecer cáncer de cuello uterino, cáncer de hígado y
sarcoma de Kaposi, respectivamente.
El cáncer se presenta en diferentes formas dentro de la
población y se puede clasificar como adquirido, que es debido a exposiciones
ambientales y hábitos tóxicos o hereditario cuando la causa de la enfermedad es
debida a factores genéticos. Las principales mutaciones que afectan al ADN y
pueden favorecer la tumorogénesis son: mutaciones génicas o puntuales,
translocaciones, inestabilidad genómica, amplificación génica y factores
epigenéticos. Una mutación génica es una alteración en la secuencia de
nucleótidos que afecta a un gen o a un alelo. Un alelo es una de las distintas
variantes en que se presenta un gen en una población. Un alelo silvestre es la
variante más común de un gen. Por lo tanto, los alelos son las distintas formas
que resultan de mutaciones de un gen silvestre. El heredar una alteración en un
gen involucrado en un cáncer no significa que la persona se tenga que ver
afectada en ningún momento, pero si indica una mayor posibilidad de padecer la
enfermedad. Por lo dicho anteriormente en esta entrada es importante cuidar el
estilo de vida y evitar la exposición a factores de riesgo.
Es importante además distinguir los tumores benignos y
malignos. Una célula que pierde el control de su ciclo celular puede formar un
tumor benigno. Los tumores benignos no son cancerosos y generalmente no son
graves si se tratan mediante cirugía, raramente ponen en riesgo la vida del
paciente. Los tumores malignos en cambio, son cancerosos ya que se caracterizan
por la presencia de células con varias anomalías que permiten su división
incontrolada y desordenada, esto trae como resultado la formación de una masa
de tejido que tiene capacidad para destruir los tejidos sanos de alrededor. Las
células cancerosas también pueden pasar al torrente circulatorio o al sistema
linfático y provocar metástasis en otras partes del cuerpo.
FUENTES:
- http://es.wikipedia.org/wiki/cancer
- www.cancer.gov
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